Tengo entre las uñas olor a ayer
Como si te lo hubiera arrancado
De los lugares que nos son propios
A lo mejor lo arañe de los hielos
Quizá de los árboles que tengo en las pupilas
Eucaliptos juguetones que me secretean al oído en el viento
Me dicen cosas que leen en tu cuerpo, tienes palabras ahí
Y me platican de ti, de las almendras negras que te añoro
De la suavidad que me aguarda y necesito en el trato diario
Me dicen que de tus cabellos negros, de cada uno de ellos
Esta atada una verdad del mundo, un beso, un niño, una nube
Los secretos en si que me aguardan pacientemente día tras día en ti.